La popularidad de la copa menstrual ha ido en aumento los últimos años y con ella, las anécdotas, creencias y mitos acerca de su uso. Es natural que tengamos todavía varias dudas sin resolver, en especial cuando se trata de nuestra salud y de cómo puede verse afectada por el uso de las copas menstruales. Sin embargo, ya has dado el primer paso para contestar a varias de ellas, ¡eureka! Esperamos que este artículo pueda responder tus inquietudes y te dé las herramientas necesarias para tomar decisiones informadas para mejorar tu salud y protegerte de infecciones vaginales.
¿Verdad o mito?
Una de las creencias más comunes es pensar que la copa menstrual causa más infecciones que otros productos de higiene femenina. Este pensamiento no podría estar más alejado de la realidad, ya que utilizar de manera correcta la copa menstrual, nos permite evitar infecciones vaginales. Al estar hecha de silicona de grado clínico, la copa no absorbe fluidos y facilita la limpieza de su superficie, lo cual dificulta el crecimiento de bacterias.
¿Por qué la copa menstrual es segura?
Así mismo, la copa menstrual no tiene químicos ni sustancias que se degradan (como el algodón), por lo que no se oxida al entrar en contacto con la sangre y no produce cambios en el ph de la vagina. Un estudio realizado por la Escuela de Medicina Tropical de Liverpool demostró que el uso correcto de la copa menstrual junto con buenos hábitos de higiene, disminuyó la aparición de candidiasis e infecciones vaginales y urinarias en las mujeres que la utilizaron. Es gracias a esto que puedes saber con certeza que el uso de la copa menstrual no te debe generar picor, olores fuertes ni cambios anormales en el flujo menstrual, ya que la flora vaginal se mantiene en equilibrio. Recuerda que estos síntomas son signo de que algo no está funcionando como debería en tu vagina.
También hay mujeres que piensan que hay mayor riesgo a sufrir un shock tóxico por usar la copa menstrual. El mismo estudio encontró que, no solo hubo una disminución exponencial en irritaciones cutáneas e internas, a comparación de las que se registraron durante y después del uso de tampones y toallas higiénicas desechables, sino que no hubo ningún aumento en casos de endometriosis, shock tóxico ni efectos negativos que pudiesen afectar la salud sexual y reproductiva.
¿Qué hacer para que el uso de la copa sea más higiénico?
La copa menstrual es mucho más higiénica que la mayoría de productos de higiene femenina, sin embargo, debes seguir las indicaciones de uso y cuidado para cuidar tu salud.
- La Beppy Cup se vende por dos, para que puedas tener un vaso limpio a mano todo el tiempo.
- Es muy importante que lo esterilices después de cada uso, con una olla o con el Esterilizador de Vapor Beppy. Esto evita que se acumulen bacterias en la superficie y que estés libre de peligro.
- No la dejes entro más del tiempo estipulado (máximo 8 horas), ya que la sangre empezará a descomponerse pudiendo causar una infección, e incluso, un Shock Tóxico.
Por último, no está de más tener cuidados extra y hábitos de limpieza que mantendrán sano el ph de tu vagina para que el uso de la copa menstrual sea más cómodo.
- Utiliza ropa interior de algodón orgánico para permitir una adecuada transpiración y evitar que la zona esté más húmeda de lo normal.
- Finalmente, recuerda que el flujo vaginal no es el mismo en todo el mes, verás cambios en su consistencia y color, es por eso que el flujo blanco no implica que tienes una infección. Sin embargo, está muy atenta a cambios de olor y textura, ya que este es un indicio claro de bacterias y hongos.